Menos la edad, el lugar de nacimiento y la disciplina deportiva que practican, a Héctor Catalá y a Iván Cano Blanco les unen muchas similitudes. Ambos son componentes del Proyecto FER. Ambos son deportistas adaptados. Ambos sufren una discapacidad visual. Ambos se disponen a debutar en unos Juegos Paralímpicos… y ambos aspiran a conseguir una medalla. A pocos días de que arranquen los Juegos, conocemos sus impresiones.
“Ahora sí, noto un mayor nerviosismo”
Agosto de 2018. Éste es el momento en el que Héctor Catalá (Serra, 33 años) recibió una de las mejores noticias de su vida. Su modalidad de paratriatlón, la PTV1, pasaba a formar parte, por fin, de la agenda de competiciones de los Juegos Paralímpicos. A partir de ese instante, su objetivo y su foco se centraron, por completo, en Tokio. Durante el camino, tres años de intensa preparación y, lo más importante, de brillantes resultados en todo tipo de torneos y eventos. Sobre todo, la medalla de oro lograda en el Campeonato del Mundo del año 2019, el celebrado en Suiza. Así se encuentra Héctor a escasas jornadas de afrontar el momento más especial de su ejecutoria deportiva.
Noto ya un cierto nerviosismo. Contenido, pero un cierto nerviosismo. Un cosquilleo por el estómago que se disparó con el inicio de los Juegos Olímpicos. En cierto modo, es inevitable. Me aproximo al momento más importante de mi carrera deportiva. Ahora, se trata de gestionar y dominar esa intranquilidad. La estancia y la vida casi monacal en Sierra Nevada, desde finales de julio, me ha venido bien.
Sigo pensando, en efecto, que el inglés Ellis es el principal favorito para adjudicarse el oro. Y luego, figuramos un ramillete de tres o cuatro participantes que estamos tremendamente equilibrados y que, en principio, vamos a disputarnos las otras dos plazas del podio. Creo que la carrera será muy igualada y que se resolverá por pequeños detalles. No obstante, lo repito: ni firmo la plata, ni firmo el bronce, ni renuncio al oro. Espero hacerlo muy bien. Después, la carrera nos pondrá en nuestro sitio.
Realmente, hubiera preferido otro tipo de recorrido, no tan llano. Un poquito más exigente. Pero, por encima de ello, considero que lo que va a marcar mucho más el desarrollo y el desenlace de la prueba son las condiciones climatológicas. Creo que lo hemos entrenado bien. Durante las últimas semanas, hemos tenido algunas sesiones muy duras. Espero que este trabajo nos permita asimilar las duras condiciones que vamos a encontrarnos en Tokio.
Seguro. No sé exactamente lo que organizarán, pero seguro que están tramando algo. Y eso, que la prueba es a la 1:30 de la madrugada. Solo espero corresponderles y celebrar a la vuelta la consecución de una medalla en unos Juegos Paralímpicos
“Tendré que hacer marca personal si quiero estar entre los mejores”
Paciencia, tranquilidad y temple. A todo ello deberá acogerse Iván Cano Blanco (Alicante 26 años) para no ponerse nervioso a medida que pasen los días y sus compañeros vayan compitiendo. Porque el atleta alicantino tendrá que esperar a la última jornada de los Juegos para afrontar su prueba, el salto de longitud T13. Durante los últimos años, Iván ha acumulado importantes éxitos: ha sido campeón de Europa en dos ocasiones, y ha conquistado una plata y un bronce en Campeonatos del Mundo. De cara a Tokio, el deportista FER no renuncia a nada, pero sabe que tendrá que ofrecer su mejor versión y, muy posiblemente, lograr marca personal para conseguir su sueño de ascender al podio
Espero que no. Posiblemente, hubiera preferido competir antes y no el último día, pero, en el fondo, no quiero darle más importancia ni creo que vaya a afectar en nada a mi actuación.
Sin duda. Tengo clarísimo que voy a tener que hacer marca personal si quiero estar entre los mejores. El nivel es cada vez más alto y deberé estar a la altura de las circunstancias.
Pues voy a citar a dos: el inglés Zak Skinner y el estadounidense Isaac Jean Paul. Estos dos son, en principio, mis grandes rivales para el podio.
