Las «Niñas de Oro» del 96 con el actual equipo español de rítmica
Minoritaria, pero prolífica en éxitos internacionales y de gran aceptación popular. Son algunas de las características de la gimnasia rítmica española, una de las grandes esperanzas del deporte nacional para incrementar la cosecha de medallas y, de esta manera, finalizar los Juegos de Río 2016 con una sonrisa. El quinteto español, con las representantes FER Alejandra Quereda y Elena López como dos de sus componentes, ya prepara en Brasil su asalto al podio, el altar que se les resistió por muy poco hace cuatro años en Londres. En los últimos años, la rítmica nacional ha acumulado muchos triunfos en Mundiales y Europeos. Pero, hasta la fecha, solo ha alcanzado un metal olímpico en la competición por equipos, el oro de Atlanta 96. En aquel histórico combinado figuraba Marta Baldó, una alicantina de la Vila-joiosa que, todavía hoy, 20 años después, se sigue emocionando con un logro casi irrepetible. Con ella, una de las conocidas como “Niñas de Oro” del 96, hemos querido evaluar las opciones de Alejandra y Elena a tan solo 2 días del gran momento.
“Las Niñas de Oro” de Atlanta 96, entre las cuales te encuentras, sois las únicas que habéis logrado una medalla olímpica por equipos para la gimnasia rítmica española. ¿Crees que este domingo perderéis la “exclusividad”?
Ojalá sea así. No me importaría lo más mínimo. No solo lo deseo; además, lo veo factible. Este equipo actual es un verdadero conjunto. Llevan mucho tiempo trabajando juntas. Están muy coordinadas. Sería muy especial que subieran al podio en el vigésimo aniversario de nuestro oro en Atlanta 96.
¿De los dos ejercicios, cuál crees que ejecutan con más brillantez, el de cinco cintas, o el mixto de aros y mazas?
De lo que les he visto últimamente, a mí personalmente me gusta más el ejercicio mixto. El de cintas es un poco más complicado, porque la cinta es un elemento difícil y peligroso. Pero creo que están en condiciones de clavar las dos actuaciones. Ya lo han conseguido en más de una ocasión en los últimos meses.
En este tipo de competiciones y deportes, también es determinante el criterio, siempre subjetivo y discutible, de los jueces. ¿Crees que a España se le respeta y valora a la hora de conceder las puntuaciones?
Así debería ser. Pero no por nada, sino por la calidad de los ejercicios de las chicas españolas y por la espectacular trayectoria de los últimos tiempos. Es cierto que Rusia, Bielorrusia o Bulgaria pesan mucho en la rítmica internacional, pero todos los equipos que participan llevan en sus espaldas un duro trabajo y los jueces deberían puntuar con rigor, con independencia y sin mirar el color de las banderas.
Bulgaria, Italia, Rusia, Israel, Bielorrusia y España. En teoría, la lógica habla de estas seis selecciones para las tres plazas de podio. ¿Cuáles crees que son los principales rivales?
No sé decirte, la verdad. Cualquiera de los cinco países que has enumerado es un rival temible y peligroso. Está todo muy igualado. Más que mirar al resto, hay que confiar en nosotras mismas, en no cometer el más mínimo error, porque intuyo que la competición estará muy reñida.
Por último, como ex gimnasta y voz muy autorizada, ¿qué consejos les darías a Alejandra y Elena?
Antes que nada, un reconocimiento. Al margen de su talento deportivo, son unas luchadoras y muy valientes. Han dejado atrás y han sacrificado muchas cosas para cumplir y desarrollar su sueño. Y luego, quiero transmitirles mucha fuerza, muchos ánimos para que lo borden, para que disfruten y, sobre todo, para que, si es posible, vean recompensado tanto esfuerzo con una medalla.