David Cantero: emoción y ambición en la Copa del Mundo de Valencia

El triatlón no descansa. Ofrece un incesante carrusel de eventos. También, para uno de los triatletas más emergentes de la Comunitat Valenciana: David Cantero. El deportista de Aldaia retoma las hostilidades casi dos meses después de su última carrera. No se enfunda el ‘tritraje’ de competición oficial desde el 8 de julio, jornada en la que disputó una Copa del Mundo desarrollada en Hungría.  Ahora, afronta una prueba muy especial. De un gran simbolismo. David se dispone a vivir una experiencia inédita. Se apresta a descubrir qué supone disputar toda una Copa del Mundo en su tierra, en su casa, en Valencia.

Cantero, de 20 años, ha preparado este evento de forma minuciosa. Ha estado concentrado en Sierra Nevada durante el último mes. Y, aunque será de los participantes más jóvenes, aspira a ser protagonista. No en vano, durante este 2023, ya ha conquistado excelentes resultados. Por ejemplo, fue séptimo en el Campeonato de Europa absoluto distancia olímpica, en Madrid; ocupó la quinta plaza en la Copa del Mundo celebrada en Huatulco, México; y finalizó en la 11ª posición en los Juegos Europeos, en Polonia. Por cierto, esta Copa del Mundo de Valencia, prevista para este sábado, será su tercera carrera en distancia olímpica.

Tras un mes en Sierra Nevada, ¿cómo te sientes a pocas horas de disputar toda una Copa del Mundo en tu ciudad?

Me encuentro pletórico y con magníficas sensaciones. Este mes de concentración en Sierra Nevada ha ido muy bien. Realmente, estoy muy esperanzado. Creo que puedo hacer una gran carrera y aspiro, cuanto menos, a acabar entre los 10 primeros.

Al margen de tus prestaciones puramente deportivas, ¿va a ser más importante que nunca la gestión de las emociones?

Sin duda. Creo que va a ser la carrera más difícil de gestionar de toda mi vida. Por primera vez, voy a tener a muchos familiares y a muchos amigos presentes en el evento y animándome. Intentaré no pasarme de revoluciones. Aunque me sienta bien, con fuerzas y con energías, tendré que dominar mis impulsos y mis nervios.

¿Le concedes más importancia a esta Copa del Mundo de Valencia o al Campeonato del Mundo sub-23, a finales de septiembre en Pontevedra?

No me resulta fácil responder a esta pregunta. Para mí, Valencia es una cita muy especial, por supuesto, pero reconozco que antepongo el Mundial sub-23 de Pontevedra. Este Campeonato del Mundo es una de las pruebas del año. Allí quiero hacerlo muy bien. Incluso, quiero optar a medalla.

Precisamente, al margen del Campeonato del Mundo sub-23 en Pontevedra, te espera un final de 2023 de auténtico vértigo con la disputa de hasta otras 4 Copas del Mundo. ¿Qué te ha llevado a diseñar esta recta final de 2023 tan exigente?

En primer lugar, si, durante los meses de octubre y noviembre, voy a disputar las Copas del Mundo de Tánger, Roma, Viña del Mar y Montevideo, es porque hice méritos durante la primera parte de la temporada, y porque me he ganado la confianza del seleccionador. Por otra parte, me he planteado todos estos retos porque me veo bien, porque me veo fresco, porque me veo competitivo, y porque considero que puedo estar muy arriba. No creo, además, que me vaya a pasar una factura física.

Por último, seguro que te hubiera gustado compartir esta Copa del Mundo de Valencia con Roberto Sánchez Mantecón…

Me hubiera encantado. Roberto es mucho más que un compañero. Es un amigo y es un espejo en el que inspirarme. Pero si ha decidido no competir en Valencia, es porque le salió genial el Test Event de París y porque tiene muy encaminada la clasificación para los Juegos Olímpicos del próximo verano. Recuerdo que sólo he compartido una prueba con Rober. Fue a finales de 2022, en la Copa del Mundo de Viña del Mar. Él fue 12º y yo, 13º.