Segunda entrega del repaso a algunos de los jóvenes deportistas que más han brillado durante este año 2020 que ya ofrece sus últimos estertores. En esta ocasión, protagonismo para tres féminas. Todas ellas han establecido auténticos hitos en sus respectivas carreras deportivas. Los repasamos:
Alba Herrero
Sábado 21 de noviembre y Castellón de la Plana. Una fecha y una localización que nunca olvidará Alba Herrero. Son la jornada y el lugar en el que la deportista alicantina, de 18 años, obtenía su primera medalla, un bronce en los 400m libres, en una competición de categoría absoluta, el Campeonato de España de piscina corta. Alba, natural de Elda y de 18 años, ya había brillado con luz propia durante su etapa como junior: en 2018, doble oro, en los 200m y los 400m libres, en el Nacional de verano; en 2019, oro en los 400m libres del Open de primavera y participación en el Campeonato de Europa. El presente curso acogía el siempre diabólico salto de la categoría junior a la absoluta. A las dificultades inherentes a este ascenso, cabe añadir todas las consecuencias del covid-19. Conclusión: a Alba Herrero el bronce en Castellón le supo a gloria.
Además, durante el pasado mes de septiembre, la joven nadadora alicantina abandonó su Elda natal y la piscina Esperanza Lag de Elche, en la que se inició y dio sus primeras brazadas de calidad, y trasladó su centro de operaciones a Valencia, a las piscinas de la Petxina y Abastos. De momento, el viraje ha salido redondo. Además, el triunfo de Castellón le ha permitido confirmar que su prueba fetiche son los 400m libres. Ya no hay ninguna duda. Alba Herrero es una de las grandes esperanzas de la natación valenciana. Está llamada a recoger el testigo de la gran Lidón Muñoz. A finales de marzo, en el Open de Primavera, nueva oportunidad para seguir creciendo.
Sonia Pereira
A punto de cumplir los 19 años (lo hará el próximo 21 de diciembre), Sonia Pereira no es sólo una de las grandes esperanzas de futuro del karate valenciano; también es una de las principales promesas en el panorama nacional. Así lo reflejan sus últimos resultados. En 2019, logró importantes éxitos internacionales (ganó el oro en la Liga Mundial junior celebrada en México, conquistó el bronce en la Liga mundial junior desarrollada en Venecia y rozó el podio en el Campeonato del Mundo junior disputado en Chile, donde acabó quinta.
En 2020, antes de que la pandemia del coronavirus lo paralizara todo, la deportista de L’Eliana aún tuvo tiempo de disputar dos grandes eventos. No tuvo especial fortuna en el Europeo sub-21 en Budapest, pero sí logró un sonado éxito: con sólo 18 años recién cumplidos, alcanzó la medalla de oro en el Campeonato de España absoluto en Leganés. Por contra, a finales de noviembre, tuvo que conformarse con el bronce en el Nacional sub-21 en Málaga. Por último, y desgraciadamente, Sonia acaba el año con una noticia que, no por esperada, deja de ser triste: la confirmación de que el karate no será deporte olímpico en los Juegos de París 2024.
Ainhoa Gimeno
Del sufrimiento al disfrute. De ver los podios desde la lejanía a ocuparlos. Además, en el escalón más alto y deseado. Como suele ocurrir, Ainhoa Gimeno (Oropesa del Mar, 17 años) acusó en 2019 el salto de categoría, de la sub-16 a la sub-18. Por contra, durante el presente curso, y pese a las todas las dificultades causadas por la pandemia, la joven deportista castellonense ha ejercido un incuestionable dominio en la prueba de lanzamiento de martillo. En febrero, logró el oro en el Campeonato de España de lanzamientos largos en Castellón. A finales de octubre, se coronó en el Nacional sub-18 al aire libre en Tarragona.
De cara al próximo año, Ainhoa Gimeno es consciente de que se incrementa la exigencia. Además, de forma exponencial. Le espera el salto a la división sub-20; es decir, le espera el martillo de 4 kg. Y, sobre todo, está obligada a demostrar si puede dar el salto de calidad para, por ejemplo, lograr la mínima que le permita clasificarse para el Campeonato del Mundo sub-20 en Kenia. Ainhoa Gimeno se ha confirmado como una de las gratas sorpresas del FER en 2020. No obstante, ahora afronta lo más difícil. También lo más apasionante.
