Oro para los hermanos Luján y bronce para Carlos Balaguer en el Mundial de vela clase 420

Inicio soñado. Principio anhelado. Cuando todavía resuenan en el ambiente los mensajes de suerte y éxitos para 2018, el Proyecto FER ya puede presumir de su primer gran triunfo en el año recientemente inaugurado. En realidad, la alegría ha sido doble. Los tres regatistas FER presentes en el Campeonato del Mundo absoluto de vela clase 420 (modalidad no olímpica, antesala de la disciplina olímpica 470, y en la que se compite por parejas) han conquistado Australia, sede del certamen. El balance es sencillamente espectacular. Los hermanos Luján, Pablo y Quique, se han proclamado campeones, mientras que Carlos Balaguer, quien formaba pareja con el balear Toni Massanet, ha acabado tercero y se ha colgado la medalla de bronce. En resumen, de las 64 embarcaciones participantes, la primera y la tercera han sido valencianas, y han lucido el logotipo del Proyecto FER. Esplendoroso inicio de curso.

Sin plan previo, los hermanos Luján han protagonizado una competición capicúa. Líderes tras la primera jornada, campeones después de la última manga. Enrique, de 18 años, y Pablo, de 17, afrontaban el sexto y último día del certamen desde la tercera plaza. Dos grandes regatas finales convertían a los deportistas de Gandía en los grandes vencedores. Un luminoso logro que compensa un curso accidentado y complejo. Un espectacular éxito que supone el mejor colofón posible a su aventura en común. Desde ahora, Enrique, el mayor, inicia una nueva etapa en la clase olímpica 49er, disciplina en la que también se compite por parejas. Mientras, todo apunta a que Pablo, el menor, seguirá un año más en 420.

Por su parte, Carlos Balaguer (Valencia, 16/07/2000) tardará mucho en olvidar el último medio año. Un periodo para enmarcar. En agosto, el joven deportista valenciano se proclamaba campeón de Europa juvenil o sub 19 de la clase 420 en Italia. En ese momento, no dudó en definir el logro “como el mayor hito conseguido en mi carrera deportiva”. Cinco meses más tarde, Carlos ha ratificado su excelente nivel con la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo absoluto. Carlos, que en Australia ha vuelto a formar pareja con el balear Toni Massanet, ha estado entre los 4 primeros durante toda la semana. De hecho, era líder al inicio de la última jornada. Finalmente, tercera plaza. Un gran epílogo a su singladura en la en la clase 420. Si no hay cambios de última hora, el año 2018 acogerá la incorporación de Carlos y su hermano Nacho a la categoría olímpica de 470. Un salto de gran significado en sus meteóricas carreras. Un indicio de que ambos van muy en serio en el competitivo mundo de la vela.