Paula Blanquer y Luna Arnás alimentan el futuro del atletismo valenciano

Con 22 exponentes, el atletismo convencional continúa siendo la modalidad con una mayor presencia en el Proyecto FER. Dos de las grandes novedades aportadas por el rey de los deportes al equipo FER 2023 son dos féminas con un futuro más que prometedor. Deslumbrante. Son Paula Blanquer y Luna Arnás. Hoy, las conocemos mejor.

Paula Blanquer

Su padre, el mítico Rafa Blanquer, se convirtió en el primer español que superó los 8 metros en salto de longitud. Su madre, Begoña Iglesias, especializada en los 400m lisos, acumuló hasta 15 medallas en Campeonatos de España. Con tales antecedentes, Paula Blanquer (Valencia, 20 años) estaba predestinada a practicar el atletismo. “Empecé a tomar contacto con este deporte a los 6 años. Lo había vivido y respirado desde que tenía uso de razón. Es decir, fue una incorporación natural y lógica. No puedo estar más contenta y agradecida. El atletismo exige mucha disciplina, mucha dedicación, mucho sacrificio. Te obliga a
muchas renuncias, pero, en el fondo, hablo por mí, me da bastante más de lo que me quita. Sobre todo, la gran cantidad de experiencias de las que disfrutas y todas las personas maravillosas a las que conoces. En suma, te hace crecer y mejorar”, comenta la nueva deportista FER.

Cada vez más cerca de las mejores vallistas españolas de la actualidad (Xenia Benach o Teresa Errandonea), Blanquer Iglesias protagonizó una brillante temporada de pista cubierta. En enero, tras una gran marca de 8:16, se quedó a tan sólo 4 centésimas de la mínima sub-23 para el Europeo absoluto de Estambul. Días más tarde, logró el oro en el Nacional sub-23 con un crono de 8:28. Por último, una más que discutible salida nula en la final, le privó de luchar por el podio en el Nacional absoluto. Su gran objetivo para este 2023 pasa por clasificarse para el Campeonato de Europa sub-23, que se celebra en Finlandia del 13 al 16 de julio. La mínima establecida es 13:40, “una marca que veo muy a mi alcance”, comenta la nueva deportista FER, quien se define como una deportista luchadora y guerrera. En lo físico, mi punto fuerte es la rapidez. En lo personal, soy autoexigente y perfeccionista. Parezco dura y distante, pero me considero
sensible y empática. Eso sí, tengo mucho carácter
, señala, para concluir, Paula.

Luna Arnás

Por su parte, Luna Arnás es la nueva sensación del atletismo valenciano y español. Ejemplo de polivalencia y capacitada para brillar en diferentes pruebas, Luna ostenta, en la actualidad, tres récords de España sub-16: en el salto de longitud, en el pentatlón y en los 60m lisos. Los tres han llegado durante una temporada de pista cubierta insuperable. Primorosa. De hecho, los 7:44 logrados en los 60m lisos suponen, también, récord de España sub-18, la sexta mejor marca sub-20 de la historia en nuestro país y
el mejor crono mundial sub-16 de este pasado invierno. Impresionante. La nueva deportista FER se considera “una afortunada y una privilegiada” por tener como entrenadora a la legendaria Niurka Montalvo, campeona del mundo de salto de longitud en 1999. “La longitud se me da muy bien. No obstante, no descarto introducirme más seriamente en las combinadas”, señala Luna, quien tiene la suerte de poder elegir. De hecho, en sus inicios, también hacía “salto de altura, porque una de mis referencias era Ruth Beitia”, recuerda.

Si de algo presume Luna Arnás (Valencia, 15 años) es de deportividad, de compañerismo. “Por supuesto, me gusta ganar; pero, cuando no consigo la victoria, felicito a la vencedora y me alegro por ella. Yo reflexiono sobre lo ocurrido y hago autocrítica para mejorar de cara a la próxima competición. Por contra, soy muy cabezota. Cuando he de pulir o perfeccionar algún detalle, no paro hasta conseguirlo”. De cara a este verano, su objetivo no puede ser otro que lograr el oro en el Nacional sub-16 al aire libre, previsto en La Nucía a finales de junio. Por sus marcas, podría ser seleccionada para su primera experiencia internacional, el Festival Olímpico de la Juventud Europea (Eslovenia, del 23 al 29 de julio). No obstante, su edad no lo hace posible.

Con una madurez impropia de sus 15 años, Luna Arnás señala que, cuando no está entrenando, “me centro en los estudios y en mis obligaciones académicas. Y una de mis aficiones es escuchar música. Me relaja. Cierro los ojos y dejo vía libre a la mente. Esto me ayuda a conocerme más y mejor”, comenta la joven deportista valenciana, amante del voleibol, de la gimnasia artística y del balonmano, disciplinas en las que, muy posiblemente, también triunfaría. Porque es todo un prodigio.