Polina Berezina, a confirmarse como la referencia de la rítmica nacional en el Mundial de Japón

Cuando todavía no se han apagado los ecos del espectacular desenlace acontecido en los Juegos Olímpicos de Tokio, donde la indiscutible favorita, la rusa Dina Averina, fue superada por la israelí Linoy Ashram, la gimnasia rítmica vuelve al primer plano informativo. En este caso, por la celebración de un nuevo Campeonato del Mundo. Hasta la ciudad japonesa de Kitakyushu, sede del evento, se ha desplaza una delegación española. Tres de sus componentes son integrantes del Proyecto FER: Polina Berezina, en la modalidad individual; Ana Gayán y Patricia Pérez Fos, en la especialidad de conjuntos. Hoy, nos ocupamos de la primera.

Tras un periodo de reflexión, su decisión es firme. Polina Berezina se ha propuesto llegar a los Juegos de París 2024. Alentada por su brillante actuación en el Campeonato de Europa celebrado en Bulgaria durante el pasado mes de junio, en el que, de 64 competidoras, concluyó en una más que meritoria 15ª plaza, y en el que firmó el mejor torneo de su vida deportiva, la gimnasta FER ha optado por darse una nueva oportunidad para cumplir su sueño de ser olímpica. “Aunque quiero ir paso a paso, porque París todavía queda relativamente lejos, y siempre y cuando la salud me acompañe, lo voy a intentar. Sigo disfrutando con lo que hago. Mantengo las ganas y la motivación. Creo que estoy en plena madurez. No considero que ya haya llegado mi final… Es decir, no veo motivo para dejarlo”, explica Polina.

Con todo, la deportista FER, quien cumplirá 24 años en diciembre, sabe que el nuevo ciclo olímpico ofrece tantas dificultades como incógnitas. Para empezar, la competencia en la rítmica nacional es enorme. Curiosamente, existen dos bloques. Dos epicentros. En el Colonial Sport de Alfafar, en la Comunitat Valenciana, se encuentran la propia Polina, Noa Ros y Lucía González. Polina es una realidad. Noa, recuperada tras 20 meses de ausencia, todavía no ha dicho su última palabra. Y la joven Lucía es un todo un diamante en bruto. Mientras, en Madrid, entrenan las vascas Teresa Gorospe y Salma Solaun, y la turolense Alba Bautista. “Cuanta más gimnastas seamos, mejor. Soy consciente de que las más jóvenes vienen pisando fuerte. La diferencia de edad se nota, claro. Yo cuento con más bagaje, con más experiencia. No obstante, para mí, Noa y Lucía son compañeras y, a la vez, amigas. Nos ayudamos en situaciones difíciles y nos alegramos de las victorias de cada una. Por tanto, el ambiente en Alfafar es muy bueno. Creo que todas deberíamos estar unidas y trabajar en equipo para que, ojalá, en París, no sólo haya una española, sino dos, entre las 20 clasificadas”, expresa la gimnasta FER.

Las incógnitas vienen dadas por el cambio de código a la hora de las puntuaciones que repartan las juezas. “Todavía no conocemos con total concreción cuáles van a ser las nuevas normas. Todo apunta a que se dará más importancia a la parte artística, se reducirán las acrobacias, se premiarán más los lanzamientos… Y en cada aparato o ejercicio, se tendrán más en cuenta, por ejemplo, los rodamientos en la pelota, los molinos en las mazas o los dibujos en las cintas. Pero todo ello lo sabremos en 2022. Y por supuesto, este cambio de código vendrá mejor a unas gimnastas y no tan bien, a otras, lo cual también será un factor relevante”, explica Polina.

En pocos días, la gimnasta FER se reencuentra con un evento, el Campeonato del Mundo, que le trae buenos recuerdos y que le concedió el esperado salto de calidad. Fue en la edición de 2019, celebrada en Bakú, Azerbaiyán. En aquel momento, la deportista de origen ruso, pero afincada en la localidad alicantina de Guardamar del Segura desde los 3 años, se dio un baño de autoestima. Se ganó un mayor respeto internacional. Logró meterse entre las 24 finalistas del total de 105 competidoras que afrontaron el all around o rotación completa. “Ahora que espero que mi cuarto Mundial sea fructífero. En esta ocasión, la final del all around no la disputan 24, sino 18, con un máximo de dos gimnastas por país entre esas 18. Creo que lo puedo conseguir. Soy optimista. Vamos a por ello. Lo de ser una de las 8 mejores en las cuatro finales parciales por aparatos ya es otra historia más complicada”, indica una Polina dispuesta a consolidarse como la abanderada de la rítmica española individual.

Días de competición

  • Miércoles 27, dos ejercicios individuales
  • Jueves 28, dos ejercicios individuales
  • Sábado 30, final individual all around (si se clasifica)