Romaric Forques: «He recuperado la ilusión por entrenar y competir»

Acostumbrado a una salud de hierro, a la ausencia de lesiones y una imparable concatenación de brillantes resultados, Romaric Forques aprendió el pasado año a convivir con la paciencia y con la resignación. A comprender que el deporte de alto nivel también tiene su cara amarga. A asumir que no siempre los deseos se corresponden con la realidad. A gestionar una mala racha. En definitiva, a madurar. Nacido en Francia en 1999, pero afincado en Valencia desde que tenía 5 años, el triatleta FER vivió un 2017 pleno de obstáculos y contratiempos. Aunque hubo momentos de felicidad, el tono general del curso anterior fue accidentado. Sobre todo, a causa de una anomalia en el diafragma, una dolencia que le provocaba un gran sufrimiento en su día a día y que no fue detectada con facilidad. Ahora, a punto de empezar su segunda y última temporada como junior, Romaric anhela demostrar todo el potencial que se le presupone. Y aspira a reinar en España para estar presente en los Campeonatos de Europa y del Mundo de la categoría.

A apenas 2 semanas de destapar un nuevo ejercicio, ¿cómo te encuentras? ¿Cuáles son tus sensaciones?

Muy buenas. Cada día mejores. Me siento muy bien, tanto física como mentalmente. A pesar de que la carga de trabajo es cada vez más intensa, me encuentro pletórico. Con ganas de afrontar mi primera prueba, la Copa de Europa junior de Quarteira, Portugal, a finales de marzo.

Tras el accidentado año 2017, ¿podemos asistir durante este curso a la irrupción definitiva de Romaric Forques?

Esa es mi ilusión. Estoy poniendo todo de mi parte para que así sea. Además del intenso trabajo que estoy desarrollando durante esta pretemporada, he recuperado esa chispa y esa ilusión por entrenar y por competir que había perdido el pasado año. Por tanto, todo va encaminado a que 2018 sea un buen curso.

El pasado verano, dejaste Madrid para volver a Valencia. ¿Qué balance haces de estos últimos meses? ¿Contento con la decisión?

Sí, estoy contento. Obviamente, habrá que esperar a las primeras competiciones oficiales y a los primeros resultados para calibrar si fue un acierto o un error. Pero, hoy por hoy, creo que hice bien. Cada etapa tiene un inicio y un final. Y pienso que, tras dos años, mi estancia en Madrid había finalizado. Necesitaba nuevos alicientes.

Ya como segundo año junior, y ya con más experiencia en la categoría, ¿te ves capacitado para ser campeón de España y clasificarte para el Europeo y Mundial?

Ese es mi objetivo. El crecimiento de un deportista se mide en resultados. En 2017, fui subcampeón de España junior y no pude estar en los grandes campeonatos internacionales. Este año , para demostrarme a mí mismo que crezco y progreso, he de ser campeón nacional, y estar en el Europeo y en el Mundial. Esos son mis grandes sueños.

Por último, de los tres segmentos del triatlón, ¿te encuentras especialmente fino o cómodo en alguno de ellos? ¿O hay un equilibrio entre natación, ciclismo y carrera a pie?

Actualmente, creo que estoy mejor en la bici, pero las sensaciones nadando y corriendo son también muy buenas. Siempre me he considerado un triatleta bastante completo.