El triatlón internacional se adentra en su semana más especial del año. En su gran fiesta de cada temporada. En esta ocasión, el escenario de tal espectáculo es Australia, que recoge el testigo de Pontevedra, en 2023, y de Málaga, en 2024. Durante cuatro jornadas, la ciudad oceánica de Wollongong acoge múltiples pruebas. Todas ellas, del máximo nivel, de gran trascendencia. La más mediática, sin duda, la octava y última Serie Mundial, la última de las ocho carreras que, durante este curso, han formado el Campeonato del Mundo de triatlón. Pero hay tres Mundiales más: el de la categoría sub-23, el de la categoría junior y el de triatlón paralímpico. Y en todas ellas, habrá representación del Proyecto FER. Roberto Sánchez Mantecón y David Cantero competirán en la Serie Mundial final. Alejandra Seguí, en la prueba del Mundial sub-23. Héctor Tolsá, en la carrera de la categoría junior. Y Héctor Catalá (clase PTVI, discapacidad visual) en la modalidad adaptada. Siguiendo un orden puramente cronológico, hoy nos ocupamos de Alejandra Seguí, Héctor Tolsá y Héctor Catalá.
Alejandra Seguí

Dentro de su progresión incesante, de su crecimiento sostenido, Alejandra Seguí (San Antonio de Benagéber, Valencia, 20 años) se dispone a afrontar su primer Mundial sub-23. La deportista valenciana se ha trabajado a pulso la presencia en Australia. Cimentó su billete mundialista con la medalla de bronce (plata sub-23) en el Campeonato de España distancia olímpica, en A Coruña, y con la 18ª plaza (la 9ª sub-23) en el Europeo distancia esprint, en Melilla. Las dos últimas comparecencias de Alejandra no han sido del todo satisfactorias. A finales de agosto, abandonó por indisposición el Campeonato de Europa absoluto modalidad olímpica. Y a mitad de septiembre, concluyó el Nacional distancia esprint en una discreta séptima plaza. La prueba sub-23 femenina se celebrará el jueves 16 a las 8 de la mañana hora española.
Así lo afronta: “Es el gran momento de la temporada y hay que dejárselo todo. Quiero ser la primera de las dos españolas y, a nivel global, el objetivo es ser top-15”.
Héctor Tolsá

Por muchas y variadas razones, Héctor Tolsá (Ontinyent, 19 años) encara el Campeonato del Mundo junior especialmente motivado. En primer lugar, porque es un Mundial; es decir, la carrera clave de la temporada; después, porque, con esta prueba, se despide de la categoría junior. Y, por último, por determinados precedentes. Hace un año, en Málaga, el deportista FER fue 5º en esta misma competición y rozó el podio. Más recientemente, a mediados de julio, en el Campeonato de Europa, en Melilla, obtuvo una novena plaza que le supo a poco, que no le satisfizo. Tolsá ha preparado a conciencia el Campeonato del Mundo. Estuvo todo el mes de agosto concentrado en altura, en Sierra Nevada. Hace apenas un mes, en el Campeonato de España absoluto distancia esprint, estuvo lejos de su mejor versión. La prueba junior masculina será a las 6 de la mañana del viernes 17.
Así lo afronta: “Espero estar disputando la carrera desde el inicio. Desde luego, quiero mejorar mi actuación en el Campeonato de Europa, el pasado mes de julio en Melilla, y aspiro a, cuanto menos, a repetir la 5ª plaza del Mundial del pasado año”.
Héctor Catalá

Mucho mérito. Mucho valor. La historia de Héctor Catalá empieza a convertirse en excepcional, en digna de encomio. No le doblegan ni sus 37 años, ni unas últimas temporadas muy accidentadas, ni el profundo dolor (sobre todo, emocional) que le generó la caída sufrida en los Juegos de París, y que, muy posiblemente, le privó de una segunda medalla en unos Juegos. Pese a los obstáculos aparecidos en su camino de un tiempo a esta parte, Héctor sigue siendo el de siempre. Es decir, un apasionado de su deporte, un estudioso de los rivales, metódico en su día a día, riguroso en su planificación… y, cómo no, competitivo, ambicioso y autoexigente.
Su última gran conquista llegó el pasado mes de junio. El deportista valenciano se proclamó campeón de Europa de triatlón paralímpico (clase PTVI, clase de discapacidad visual) en Besançon, Francia. Con su nuevo guía, el madrileño Diego Méntrida, Catalá se impuso a rivales muy cualificados y reeditó el oro continental conseguido en Lisboa, en 2016. Héctor no se pierde un Mundial desde 2015. Se proclamó campeón en 2019, en Lausana. En este Mundial, competirá en la mañana del sábado 18 de octubre.
Así lo afronta: “Para mí, estar en un nuevo Mundial es como un premio, como un regalo; sobre todo, por demostrarme a mí mismo que sigo en la pomada. Me encuentro en un muy buen momento. Estoy volviendo a disfrutar como hacía tiempo que no lo hacía. No me pongo la presión de hacer podio sí o sí, porque soy consciente de la igualdad existente en mi categoría. Salvo el británico Dave Ellis, que está por encima del resto, hay mucho equilibrio. Puedo ser segundo, pero también séptimo”.