Iker Bonillo, vértigo y adrenalina; Paula Morcillo, precisión y frialdad

Seguimos presentando a las muchas caras nuevas que se han incorporado al Proyecto FER 2022. Hoy, es momento de conocer a dos deportistas cuyas modalidades son absolutamente antagónicas. Por una parte, Iker Bonillo, ciclista. Por otra, Paula Morcillo, tiradora especializada en la disciplina de foso olímpico.

Lo practicaba su bisabuelo, su abuelo y su padre. Con estos antecedentes, Iker Bonillo (Silla, cumplirá 19 años a principios de julio), estaba predestinado al ciclismo. De hecho, desde muy pequeño, con sólo 4 años, el nuevo deportista valenciano ya estaba encima de una bicicleta. “Mi deporte me ha enseñado a ser disciplinado, organizado y constante. Lo que menos me gusta del ciclismo es que, por mucho que te prepares, no siempre los entrenamientos se ven reflejados en las competiciones”, comenta Iker. El nuevo componente del Proyecto FER no tiene clara una respuesta cuando se le pregunta si se encamina hacia la ruta o hacia el velódromo. “No puedo contestar de forma categórica. Desde este año, a raíz de la incorporación a mi nuevo equipo profesional, voy a dar cierta preferencia a la ruta, pero en absoluto voy a desatender la competición en el velódromo. De hecho, uno de mis grandes objetivos pasa por ser seleccionado para el Campeonato de Europa sub-23 de pista, previsto en Portugal para el mes de julio. Creo que se pueden compaginar las dos modalidades. Esa es mi intención durante los próximos años”, explica el ciclista de Silla.

En la carretera, Iker Bonillo considera que proyecta sus principales fortalezas “en el sprint, y en el terreno sinuoso u ondulado. Me cuesta más cuando el recorrido se empina, pero pienso que soy capaz de defenderme bastante bien en casi todos los terrenos. En el velódromo, no hay duda. Se me dan mejor las pruebas de fondo: la persecución individual, la persecución por equipos, la madison, la puntuación… Ahora bien, en ambos casos, he de saber desconectar tras una competición. Le doy demasiadas vueltas a mis actuaciones, lo cual tampoco es del todo saludable. Hay que detectar y reconocer los fallos, por supuesto, pero no tenerlos presentes mucho tiempo en la mente”, comenta Iker, vinculado con las bicicletas hasta en sus ratos libres. “Me gusta mucho la mecánica. Cuando tengo tiempo, no me importa pasarme por un taller de bicis y ayudar a repararlas”.

Precisión, puntería, autocontrol, frialdad, temple, capacidad de abstracción… Son algunas de las virtudes que debe reunir cualquier deportista especializado en tiro olímpico. Son algunas de las fortalezas acreditadas por Fátima Gálvez y Alberto Fernández, medalla de oro en la modalidad de foso olímpico en los Juegos de Tokio del pasado verano. Son algunas de las características que posee Paula Morcillo Sempere (L’Alfàs del Pi, 18 años), nueva y prometedora componente del Proyecto FER. La tiradora alicantina siempre había practicado baloncesto; “de hecho, es un deporte al que, siempre que puedo, sigo jugando. Pero hace muy poco, sólo dos años, acompañé a mi padre al campo de tiro de Jávea. Probe y me gusto. Es decir, mis inicios en el tiro, al margen de recientes, fueron casuales, fortuitos”, recuerda Paula.

La deportista alicantina explica por qué escogió la escopeta y la modalidad de foso olímpico y no la pistola de aire comprimido. “La escopeta es el primer complemento que conocí y con la que más cómoda me sentía. Y me decidí por el foso olímpico porque es tan complejo como divertido, y porque me concede opciones de participar en unos Juegos. Considero que es más importante la concentración que la precisión. Si no hay concentración, no hay ni precisión ni acierto a la hora del disparo”, explica Paula, que, durante este 2022, ha logrado la medalla de plata en el Campeonato de España junior y ha logrado el bronce en el torneo de parejas mixtas de la Copa del Mundo junior celebrada en Alemania a principios de mayo.

No obstante, en su agenda y siempre que sea convocada, aparecen dos grandes citas para la segunda mitad de este 2022: el Campeonato de Europa junior (a finales de agosto en Chipre) y el Mundial junior (a finales de septiembre en Croacia). El pasado año, la tiradora FER logró buenos resultados en estos dos mismos torneos: en el Mundial de Perú, fue cuarta en parejas mixtas y octava en individual: en el Europeo, acabó 16ª en individual. “En lo puramente deportivo, creo que atesoro mis virtudes, pero todavía tengo mucho margen de mejora”; comenta Paula, quien entrena, principalmente, en el campo de tiro de Cheste “con mi entrenador, Salvador Narbona, mucho más que un preparador.

Lo admiro por sus métodos, por todo lo que consiguió en su época de tirador y por lo que me ayuda a progresar. Y, claro, dos de mis grandes ídolos son Fátima y Alberto, campeones olímpicos en Tokio”.