Aunque poca vinculación y escasas coincidencias, por no decir ninguna, existen entre sus disciplinas, la atleta Gema Martí y la nadadora Marina Lázaro se disponen a afrontar, en pocos días, sendos Campeonatos de España. Para Marina, el evento en cuestión, el Nacional junior de larga distancia, es peculiar. Aunque lo dispute en su contexto natural, la piscina, la distancia (5.000m) y las características (100 largos a una piscina de 50m) son poco comunes. Le sitúan ante un examen muy singular. Más común y habitual es el escenario para Gema. Común y habitual en lo espacial. No tanto, en lo temporal. La deportista gandiense se encuentra ante un tramo de calendario de auténtico vértigo. La lanzadora de martillo va a enlazar tres Campeonatos en apenas 15 días. El sábado 23 de febrero, el Campeonato de España sub’20 de lanzamientos largos de invierno en Castellón. Una semana mas tarde, el 1 de marzo, será una de las participantes más jóvenes en el Nacional absoluto de lanzamientos largos de invierno en Jaén. Y acto seguido, el sábado 8 de marzo, estará presente en la Copa de Europa de lanzamientos largos, certamen internacional que se celebra en Eslovenia. Aunque Gema es sub’20 de segundo año, gracias a la consecución de la mínima exigida, tomará parte en el torneo sub’23. Significativo.
No tuve un buen verano en 2018. Ya lo superé. Ahora, me encuentro muy animada de cara a estos 3 eventos consecutivos
Gema Martí
Pocas dudas existen acerca de la condición de Gema Martí de sucesora, de heredera, de la histórica Berta Castells. La deportista del Proyecto FER representa el futuro del lanzamiento de martillo en España. Ocurre, sin embargo, que Gema tuvo una segunda mitad de 2018 para olvidar. Condicionada, sin duda, por los estudios y por la siempre decisiva prueba de acceso a la Universidad, la atleta gandiense no cumplió con su condición de favorita en el Campeonato de España sub’20 al aire libre y estuvo por debajo de sus expectativas en el Campeonato del Mundo de la categoría en Finlandia. “Aquello ya es historia. No tuve un buen verano deportivo en 2018 y no conseguí los objetivos marcados. No hay que darle más vueltas. Ya lo superé. Ahora, me encuentro en perfectas condiciones y muy animada de cara a estos 3 eventos consecutivos que tengo en breve”, señala Gema.
En esta temporada invernal, la atleta FER aspira a ser oro en el Nacional sub’20 y a, cuanto menos, repetir el bronce logrado en el Campeonato de España absoluto del pasado año. Y se ve capacitada para establecer un nuevo registro personal, cifrado en los 60,25m logrados en marzo de 2018 en Montijo, Extremadura. No obstante, “mi gran objetivo para 2019 es la presencia en el Europeo sub’20 de verano, fijado a principios de julio en Suecia. No solo la presencia. Después de la decepción en el Mundial sub’20 del pasado año, este año quiero ser, sí o sí, finalista en el certamen continental”, apunta, ambiciosa, Gema.
Mi objetivo del año es estar en el Europeo junior de verano en Rusia. Las mínimas son muy exigentes, pero no inalcanzables
Marina Lázaro
Otro Europeo, en este caso el junior de natación, que se celebra del 3 al 7 de julio en Kazán, es la meta que se traza Marina Lázaro. “Es el evento y el sueño que aparecen marcados en rojo en mi calendario. La verdad es que las mínimas que se me exigen son bastante duras, pero no inalcanzables. Los tiempos que hice el año pasado y la ilusión que tengo por clasificarme me hacen ser bastante optimista. Puedo conseguir el pasaporte en diversas pruebas; especialmente, en los 400m estilos, en los 800m libres y en los 1.500m libres. Espero llegar bien al Open de primavera del próximo mes de abril, única oportunidad para lograr la deseada clasificación”, comenta la deportista eldense.
De momento, en apenas 9 días, tendrá un examen tan duro como singular, el Campeonato de España junior de larga distancia, una prueba que se celebra en piscina de 50m y sobre una distancia global de 5.000m. Es decir, hay que dar 100 largos. “Seremos un total de 20 participantes. Llego con la quinta mejor marca de todas ellas, pero no descarto subir al podio. Es una prueba muy exigente, pero soy nadadora de fondo y espero hacerlo bien”, concluye Marina.