Los años preolímpicos acostumbran a ser sinónimo de vértigo, exigencia y ritmo infernal para muchos deportistas. Por el contrario, son incompatibles con conceptos como tregua, descanso o paréntesis. De ello pueden dar fe Raúl Martínez y Daniel Ros, dos taekwondistas del Proyecte FER, inmersos en una vorágine para intentar materializar el sueño de estar en Rio 2016 el próximo verano. Ambos comenzaron a competir muy pronto. Tanto como febrero. Han estado en el Campeonato del Mundo de Rusia. Han disputado los Juegos Europeos de Bakú. Han participado en la Universiada de Corea. Y el año todavía no ha terminado. La agenda sigue abierta. El frenesí continúa. Próxima parada, Moscú.
Tanto Raúl como Daniel se desplazan hasta la capital de Rusia para participar en un Grand Prix, la segunda competición que más puntos reparte durante este año 2015 después del Mundial. El primero en entrar en acción, lo hará este viernes 14 de agosto, será Daniel Ros, de 21 años. El deportista de Catral (categoría de peso corporal de más de 80 kg) fue quinto en el Mundial y medalla de bronce en Bakú. “Estoy muy satisfecho con mi rendimiento durante este 2015. He crecido bastante. Noto que he mejorado, pero todavía queda camino por recorrer”. Daniel Ros ocupa la vigésimo quinta posición en su categoría.
Un día más tarde, el sábado 15 de agosto, será el turno de Raúl Martínez, de 24 años. El ilicitano, que empezó pletórico el año, no pudo brillar ni en el Campeonato del Mundo ni en los Juegos Europeos. En ambos casos, cayó eliminado en la ronda de octavos de final. Recuperado mentalmente de estas decepciones, el deportista FER acude a Moscú con la ilusión y los ánimos absolutamente revitalizados. “De momento, le pongo un 7 a mi temporada. Tengo muchas ganas de reivindicarme de nuevo y de volver a hacer una gran competición. Viajo a Rusia con muy buenas sensaciones”, apunta un Raúl Martínez situado en este momento en la decimosexta posición de su categoría, menos de 80 kg.
Tras Moscú, tanto Daniel como Raúl todavía afrontarán nuevos retos. En concreto, otros dos Grand Prix. En septiembre, en Turquía. Y en octubre, en Manchester. Si a la conclusión de estas tres pruebas son capaces de estar entre los 8 primeros del mundo en sus respectivas categorías, se clasificarían para las Series Mundiales, previstas para México en diciembre. Y lo más importante, acariciarían su presencia en los Juegos Olímpicos de Rio. Por tanto, para ambos, a Brasil se accede vía Moscú, Estambul y Manchester. Los próximos dos meses se presentan decisivos.