Al quinto tiro, acertó. Al quinto intento, dio en la diana. A la quinta gran competición del curso, puso el ojo y la bala. Andrés García García consiguió ayer, domingo 8 de junio, su primer gran resultado de la presente temporada: medalla de oro en el Campeonato de España de foso olímpico, torneo celebrado en Barcelona y que reunió a los mejores tiradores nacionales. Todo un relanzamiento tras no poder brillar ni en el Gran Prix de Qatar, ni en las Copas del Mundo absolutas desarrolladas en Perú y Chipre. Hace apenas 14 días, Andrés ya había exhibido una clara mejoría en la Copa del Mundo junior Alemania, en la que ocupó una más que notable 5ª plaza. Este pasado fin de semana, tras ir de menos a más, tras un inicio dubitativo y un final apoteósico, el embajador FER superó a rivales tan cualificados como Manuel Murcia, Joan García, Adrià Martínez, Alberto Fernández… En suma, recuperó la ‘normalidad’. Porque lo habitual en Andrés, especializado en la modalidad de foso olímpico, es que su escopeta, pacífica y nada bélica, alcance con facilidad los platos que vuelan por los aires.
Andrés García nació en 2004 en la pequeña localidad conquense de Aliaguilla. No obstante, reside y está empadronado en Requena desde 2020, desde que tenía 16 años. Y se ha formado deportivamente en las instalaciones del Complejo Deportivo de Cheste. Pese a su juventud, el nuevo componente del Proyecto FER ya posee un palmarés más que notable. En 2022, se proclamó campeón de Europa junior en Chipre. En 2023, se colgó la plata en el Mundial junior celebrado en Corea. Y en 2024, se convirtió en campeón del mundo junior en Perú, ganó el Preolímpico de Doha y participó en los Juegos Olímpicos de París, “donde viví una gran experiencia personal. Con sólo 20 años, cumplía uno de mis sueños desde pequeñito. No obstante, la alegría no fue completa. Gracias al éxito en el Preolímpico y a unos entrenamientos previos muy buenos, llegaba a París con altas expectativas. Pero los nervios me pasaron factura. Los nervios y la inexperiencia. En este deporte, cuanta más experiencia, longevidad y bagaje, mucho mejor”, explica Andrés.

Sus inicios en el tiro olímpico son muy curiosos. “Todo se originó en las fiestas de las localidades cercanas a Aliaguilla, mi pueblo natal. En todas estas poblaciones, se hacían tiradas improvisadas. Se conocen como ‘trillos’. Mi padre y mi hermano mayor participaban, y yo les acompañaba. Cuando cumplí los 14 años, me saqué el permiso de armas y comencé a participar yo también. Al ver que se me daba bien y me gustaba, un amigo de la familia me introdujo en el foso olímpico. Empecé a competir en las tiradas autonómicas que se hacían en Cheste. De ahí, y muy rápidamente, ya di el salto a nivel nacional y, posteriormente, internacional”, rememora el tirador FER.
Preguntado por la razón que le ha llevado a especializarse en el foso olímpico y no en otras modalidades, Andrés señala que, quizás, no tenga el “suficiente pulso para ser tan preciso como, por ejemplo, se requiere en el aire comprimido. Además, esta disciplina del tiro al plato, del foso olímpico, es la más entretenida y dinámica. Yo le daría un 80% a la concentración, y un 20% a la técnica o a la precisión. Por ello, trabajo permanentemente con un psicólogo deportivo”, explica Andrés, quien se define así: “Me considero muy competitivo, muy autoexigente. No tengo suficiente ni estoy conforme con casi nada. Siempre quiero más y más. Ser así tiene su parte positiva, pero también, negativa, por el exceso de presión que me impongo. Y como he comentado antes, cuanta más experiencia y veteranía, mejor a la hora de gestionar todo tipo de situaciones y escenarios. A mí, aún me falta recorrido”, comenta.
A falta de confirmación, el siguiente gran evento que tiene previsto afrontar Andrés García es la Copa del Mundo absoluta de Italia, entre el 10 y el 14 de julio. Sólo unos días más tarde, llegará el momento culminante de 2025: “Entre el 30 de julio y el 4 de agosto, se celebrará en Francia el Campeonato de Europa, tanto junior como absoluto. No sé en qué categoría lo afrontaré. Depende de la decisión de los responsables federativos. Me gustaría, claro, ser seleccionado para el torneo absoluto, pero he de esperar unas semanas”, explica el deportista FER. No obstante, para Andrés, tras el reciente oro en el Campeonato de España, la temporada empieza a cambiar. Y para bien.