El mes de junio se presenta vibrante y prolífico. Propone eventos de gran relevancia y trascendencia. Uno de ellos es el Campeonato del Mundo de judo, torneo que va a disputarse en Hungría desde el 13 hasta el 20 de junio. Las grandes estrellas internacionales de los tatamis están preparadas para exhibir, su fuerza, su habilidad, su destreza, su concentración, su explosividad, su exuberancia física… Por mucho que todavía los resultados no computen de manera directa en el camino hacia los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, un Campeonato del Mundo de judo nunca es un torneo de transición. Jamás está desprovisto de trascendencia. En ningún caso, se presenta vació de alicientes y reclamos. El Proyecto FER va a estar muy bien representado en el certamen universal gracias a Ayumi Leiva y a Luis Barroso. Hablamos con ambos
Ayumi Leiva
Cuatro de cinco. Balance casi inmejorable. Ayumi Leiva (23 años, nacida en Cuba, pero residente en Valencia desde mediados de 2021) ha arrancado el nuevo ciclo olímpico como una exhalación. Ha ascendido al podio en cuatro de los cinco torneos que ha afrontado: por orden cronológico, bronce en el Grand Slam de París (1 de febrero), bronce en el Grand Slam de Bakú (14 de febrero); plata en el Grand Slam de Uzbekistán (28 de febrero) y plata en el Grand Slam de Kazajistán (9 de mayo). Sólo ha habido una mácula: la decepción sufrida en el Campeonato de Europa de Montenegro, donde acabó en una insatisfactoria 7ª posición. Con estos imponentes resultados, Leiva se perfila como la indiscutible dominadora del judo español en la categoría de menos 52 kg. En su primer Mundial absoluto, Ayumi competirá el sábado 14.
Sinceramente, no. Sobre todo, me sorprendió el bronce en el Grand Slam de París, el primer torneo del año. Aquella medalla me aportó mucha confianza. Después, todo ha venido rodado.
Para mí, este evento es muy importante. Es mi primer Mundial absoluto. Estoy tan emocionada como nerviosa, motivada e ilusionada. Espero ser la de los Grand Slam y no la del Campeonato de Europa, y espero que sea una grata experiencia.
Todavía, no. Desde luego, Los Ángeles 2028 es mi meta, pero no me quiero precipitar. Todo a su tiempo. Todo llegará. Ahora, quiero ir despacio, poco a poco.
Luis Barroso
Aunque en sus combates se puede apreciar una paulatina evolución, Luis Barroso (Talavera de la Reina, 22 años, pero afincado en Valencia desde finales de 2021) está pagando el peaje inherente a su primera temporada en el circuito internacional. Así ha ocurrido en las tres principales competiciones que ha disputado en el presente curso. En el Grand Slam de París, cayó derrotado en el segundo combate. En el Europeo de Montenegro, perdió en primera ronda. Y en el Grand Slam de Kazajistán, volvió a caer en el primer cruce, aunque tuvo la victoria mucho más cerca que en los anteriores precedentes. De momento, su única alegría de 2025 ha sido el bronce alcanzado en el Grand Prix de Austria, el pasado 7 de marzo. Barroso (categoría de menos 60 kg) busca en este Campeonato del Mundo un salto de calidad que le permita poner en cuestión la hegemonía nacional que ejerce Fran Garrigós. El turno de Luis llegará el viernes 13.
Es cierto que los dos últimos torneos, tanto el Campeonato de Europa como el Grand Slam de Kazajistán, no han salido como quería, pero, por ejemplo, en este último, estuve mucho más cerca de la victoria que de la derrota. Es decir, dentro de lo malo, me quedo con esa mejoría. Aunque sea un tópico, todo forma parte de un proceso.
No me impaciento en absoluto. Creo mucho en mí, en mis entrenadores. Y estamos en el buen camino. De hecho, aunque ni en el Europeo ni en los Grand Slam han ido bien las cosas, no es menos cierto que en marzo logré un bronce en un Grand Prix.
No. Es mi primer Mundial, y voy con unas ganas y con una ilusión incontenibles. Hemos hecho un buen trabajo, hemos entrenado bien, estamos muy motivados… No me conformo con ganar un combate o dos. ¿Por qué no podemos llegar al tramo final y luchar por un podio?
