El primer doble top-10 para el triatlón valenciano en una Serie Mundial constituyó un enorme éxito. Un segundo doble top-10 en otra Serie ya representa toda una obra de arte. Una hazaña antológica. Los firmantes de tales gestas son los admirables y admirados David Cantero y Roberto Sánchez Mantecón. Dos currantes, dos soldados del deporte. Dos ejemplos de esfuerzo incondicional, de conmovedora capacidad de trabajo, de prodigiosa mentalidad, de envidiable afán de superación… El pasado mes de febrero, en Abu Dabi, en una prueba desarrollada en distancia esprint, Roberto fue séptimo y David acabó noveno. El pasado sábado, en Alghero, en Italia, en una carrera disputada en distancia olímpica, aún lo hicieron mejor: David concluyó sexto y Roberto, séptimo. Palabras mayores.
Ambos casos resultan fascinantes. Las dos historias son emocionantes. Por una parte, Roberto Sánchez Mantecón (Manises, 29 años) simboliza una reivindicación permanente. Una rebeldía incesante. Ya lo fue en el anterior ciclo olímpico. Contra viento y marea, se propuso llegar a los Juegos de París. Y lo logró. A Roberto nadie le podrá arrebatar el honor de haberse convertido en el primer triatleta valenciano en disputar unos Juegos Olímpicos. Aunque su rendimiento en París no fue el esperado, el mero hecho de clasificarse y de competir en la capital francesa supuso toda una proeza. Ahora, Roberto tiene otro gran objetivo: demostrar que aún no ha dicho su última palabra, que todavía puede ser competitivo. Lo está consiguiendo. Además, con creces. De hecho, sus dos séptimas posiciones en las Series de 2025 representan sus mejores resultados de siempre tras la memorable medalla de bronce conquistada en la Serie Mundial de Bermuda (en noviembre de 2022).
David Cantero, por su parte, representa la pujanza, el brío, la savia nueva, el relevo generacional. Pese a su insultante juventud (sólo tiene 22 años), el deportista de Aldaia ya acumula una lustrosa colección de triunfos. Su palmarés es más que respetable. Oros en Copas de Europa; victorias en Copas del Mundo; vigente campeón del mundo sub-23… Parece ungido para convertirse en una de las sensaciones del triatlón internacional durante las próximas temporadas. De hecho, en sus dos primeras Series Mundiales, ha acabado noveno y sexto. Es decir, aunque no lo es, se comporta con la madurez de un veterano. Se maneja con la personalidad que sólo está al alcance de los auténticos privilegiados. Falta una gran detonación, una gran explosión. Es decir, un podio en una Serie, el gran escaparate del triatlón mundial. Pocos dudan de que ese momento llegará. La incógnita reside en el cuándo y en el dónde.
El pasado sábado, en Alghero, población de la isla de Cerdeña, los dos deportistas FER volvieron a deslumbrar en sus tramos favoritos: la carrera a pie. Sus remontadas en ese segmento resultaron fabulosas. De hecho, de los 42 participantes, David fue el más rápido en cubrir los 10 km (29:59) y Roberto el cuarto más veloz (30:11). Los cinco triatletas que les precedieron en la meta fueron, por este orden, el brasileño Miguel Lopes Hidalgo, el australiano Matthew Hauser, el francés Leó Bergère, el australiano Luke Willian y el canadiense Charles Paquet. De momento, tras la celebración de tres Series Mundiales (cabe recordar que los dos triatletas valencianos compitieron en Abu Dabi y en Alghero, pero no lo hicieron en Yokohama), Roberto es octavo y David, noveno en la general. La siguiente cita llegará dentro de un mes y medio, a mediados de julio, en Hamburgo.
Declaraciones de David Cantero: “La carrera fue una pasada, de principio a fin. Sólo cedí 40 segundos en la natación. Es decir, no era mucho tiempo y podía recuperarlo. Y en la carrera a pie, lo di todo para conseguir una gran sexta plaza. Muy satisfecho, tanto por mí, como por mi amigo y compañero Rober. Este 2025 va fenomenal”.
Declaraciones de Roberto: “Estoy contento. Sobre todo, porque me vuelvo a ver sólido y regular. Estar octavo en la clasificación global de las Series Mundiales tras dos carreras me enorgullece. 2025 apunta a muy buen año”.
