Néstor Abad vuelve a Cottbus sin pesadillas ni angustias

Ocurrió hace un año exacto. Sucedió en Cottbus, Alemania. Transcurría el mes de marzo de 2014. Una desgraciada y maldita caída, nada más empezar el ejercicio de anillas, lo colocaba de nuevo en las tinieblas. La rodilla derecha de Néstor Abad quedaba destrozada con la rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco. Y era la segunda vez que le pasaba. Ya sufrió el mismo percance, en ese momento durante un entrenamiento, en 2011.

Un año después de aquella desgracia, el gimnasta de Alcoi vuelve al lugar de los hechos, regresa a su particular zona cero. Y lo hace sin miedos, sin temores, sin pesadillas. Con la mente limpia y sin que aquel accidente ejerza una influencia nociva en su mentalidad.

Para Néstor Abad, el mayor logro en 2014 no ha llegado en ninguna gran competición. Su hito más importante durante el pasado año ha sido recuperarse física y anímicamente del durísimo golpe sufrido en aquella instalación alemana. «Tenía dos opciones: o hundirme, o asumirlo con normalidad y resignación. Afortunadamente, mi mente optó por esta segunda vía. Y he salido reforzado, he madurado», comenta el gimnasta de Alcoi.

Después de meses de rutina y largas sesiones de rehabilitación y fisioterapia, Néstor volvió a poner a prueba su rodilla el pasado mes de diciembre. Y de momento, las sensaciones son «son muy buenas». El deportista FER ya ha competido durante este año 2015 en diversos concursos menores, fundamentalmente en Italia, pero afronta su primera competición importante este fin de semana en la prueba de la Copa del Mundo de Cottbus, donde el pasado año se paró el tiempo, donde oscureció de repente. «Posiblemente sienta algo especial cuando vuelva y entre al pabellón. Me inspira respeto, pero no miedo. Quiero quitarme esa espina. Cuando me ponga a calentar, seguro que ni me acuerdo», señala el gimnasta alicantino.

La Copa del Mundo de este fin de semana en Alemania supone el inicio de lo verdaderamente serio para Néstor en este 2015. A partir de ahora, «empieza lo bueno». En Cottbus, desde el jueves al domingo, competirá en dos aparatos: potro con arcos y barra fija. Y es en esta última especialidad donde aspira a lo máximo. Y después de Cottbus, a mitad de abril, llegará el Campeonato de Europa en Francia, donde Néstor tiene la plaza prácticamente asegurada. En junio será el momento de los Juegos Europeos en Bakú; y en octubre, el turno del Campeonato del Mundo en Glasgow. Tres competiciones que se asemejan a sendas escalas en su viaje más importante, el que debe trasladarle a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro de 2016. Pese a su juventud (22 años recién cumplidos), el deportista FER es uno de los baluartes de la selección española. Y si las lesiones dejan de castigarle, puede marcar una época en la gimnasia española.